Porque el tiempo es oro.
Frente a la idea generalizada y mal fundada sobre ir “corriendo a los sitios”, nuestro trabajo se basa en permitirle conocer aquello que realmente es importante para su viaje. No hace falta preocuparse sobre horarios de monumentos, si están cerrados o abiertos… incluso podemos pasarnos horas leyendo guías de viaje y nunca estaremos seguros de lo que es realmente importante para conocer de una ciudad. El Guía Oficial lo hará por tí y te enseñará lo que es más importante de un lugar.
Porque es una opción ideal para viajes cortos.
Los viajes no son indefinidos en el tiempo (ya quisiéramos todos nosotros…).Tienen una duración, más o menos corta y en el caso de Salamanca, muchas veces de un día y a lo mucho, de un fin de semana. Y ante esta perspectiva, queremos tomar referencias espaciales y queremos ubicarnos en el espacio. Para ello contratamos un Guía Oficial. Nos dará indicaciones de cómo fue la ciudad donde estamos, porqué la ciudad que visitamos es como es en la actualidad y cómo ha llegado hasta ese momento.
Porque no queremos perdernos.
A través de su recorrido conseguimos ubicarnos espacialmente en la ciudad y tener un mapa de los puntos más relevantes. Esto será de gran utilidad para todo aquello que vamos a hacer a lo largo de ese día e incluso lo que haremos al día siguiente.
Porque nos permite una comunicación directa y obtener información extra que se ajuste a nuestros intereses.
Un guía oficial de Turismo establece una comunicación con el visitante. Nos gusta conocer las personas que nos contratan, conocer sus intereses y por supuesto estamos abiertos a comentarios y preguntas. De hecho, nosotros también aprendemos de los turistas que nos visitan.
¿Buscas rutas alternativas y distintas?
Porque promocionamos rutas alternativas, distintas y de gran interés. Conocemos como nadie aquellos lugares menos visitados, ofreciendo así rutas diferentes para vivir experiencias únicas.
Porque es la mejor manera de conocer gente del lugar.
Somos los guías locales por excelencia. Vivimos en el lugar donde trabajamos. Conocemos sus detalles, curiosidades y leyendas que muchas veces no están escritas en ningún libro. Son aspectos que muchas veces se han transmitido oralmente y forman parte de nuestras experiencias personales y recuerdos.
Porque interpretamos nuestro patrimonio cultural.
Nuestro cometido es interpretar la historia, el patrimonio y la ciudad actual. No sólo nos referimos a datos históricos, que también son necesarios, sino igualmente geográficos, de política, literatura, arte y naturaleza. Todos estos aspectos configuran la ciudad.